La Diócesis Valentina no tiene asignación alguna de los presupuestos generales del Estado ni de la Generalitat Valenciana.
La misión de la Iglesia es evangelizar y para llevar adelante esta tarea evangelizadora son necesarios recursos económicos. Necesitamos templos, salones parroquiales, sacerdotes a los que hay que sostener, un seminario, atención religiosa en hospitales, cárceles…
Desde 2007 en virtud del acuerdo firmado entre el Estado Español y la Santa Sede, la Iglesia recibe solo el 0,7% de aquellos que voluntariamente marcan la casilla de la Iglesia en su declaración de la Renta.
El dinero que recibe la Conferencia Episcopal procedente de la X en la casilla de la renta, lo reparte solidariamente entre las 69 diócesis españolas.
La Diócesis Valentina, para el ejercicio 2020, ha cubierto tan solo el 26,28% de sus gastos con el dinero recibido por la vía de la X de la declaración de la renta. El resto de los gastos, el 73,72%, han salido de los donativos, colectas, arrendamientos y otras pequeñas actividades económicas.